El auge de la IA es imparable y está en nuestras manos utilizar estos avances a nuestro favor y no morir en el intento. Por tanto, ¿qué debemos hacer si lo que queremos es impulsar nuestro libro y hacerlo más veraz?
En primer lugar, partamos en la importancia de la investigación de un escritor experto, de ahí nace el cimiento, sostén y raíz de su libro, y, ¡vaya sorpresa!, la IA es una herramienta poderosa para la investigación, ya que permite analizar grandes cantidades de información en poco tiempo y encontrar patrones y tendencias en los datos. Además, puede ayudarnos a reducir el tiempo de búsqueda y aumentar la eficiencia en nuestro proceso de creación.
Hay herramientas que pueden analizar las características de un sitio web, como su autoridad, antigüedad y enlaces entrantes, para determinar su confiabilidad mediante motores de búsqueda especializados en fuentes académicas y científicas, como Google scholar o Semantic scholar. También hay herramientas de análisis de datos que pueden ayudarnos a identificar patrones y tendencias en grandes conjuntos de datos.
Sin embargo, hoy, nos vamos a centrar solamente en el gran boom de Chat GPT y cómo podemos hacer de esta IA nuestra aliada. Esta IA no solo puede ayudarnos con la redacción de textos, resúmenes, ideas de contenido para redes sociales y demás, sino que también puede ayudarnos a evaluar la confiabilidad de una fuente de internet al considerar la reputación y credibilidad del autor o sitio web; la precisión y calidad de la información; así como la fecha y actualidad de la información proporcionada.
La pusimos a prueba y esto fue lo que sucedió:
Le preguntamos a Chat GPT, cómo y de qué manera debíamos proporcionarle información para que nos ayudara a detectar y verificar si una fuente de internet era confiable. Al brindarnos los detalles, le dimos la información pertinente y el resultado fue sorprendente. Nos pudo verificar, instantáneamente, que la fuente escogida aleatoriamente era efectivamente confiable y no sólo esto, sino que, además, nos dio detalles sobre los autores y hasta cuál era objetivo del artículo. Su conclusión fue: “en general, la información proporcionada por SciELO y la Revista Panamericana de Salud Pública, así como la reputación de los autores, sugieren que el artículo es confiable”.
Aunque su respuesta nos era suficiente, le pedimos que nos arrojara más información sobre dónde más podríamos verificar fuentes confiables. Su respuesta, automática y sin líos, fue brindarnos otras herramientas y servicios en línea que utilizan técnicas de inteligencia artificial para analizar la veracidad de la información en un sitio web, inclusive, nos habló de herramientas especializadas en detección de noticias falsas y contenido engañoso como Factmata y Veracity.ai.
Nuestros comentarios finales:
Esto es una pequeña semilla de lo que nos puede aportar las IA en la optimización de nuestro trabajo. Chat GPT es sólo una de las muchas herramientas en la que podemos apoyarnos para agilizar nuestros procesos. Sin embargo, aunque las IA se han convertido y seguirán siendo una herramienta valiosa, no podemos evitar preguntarnos si se trata de un arma de doble filo.
Por otro lado, aunque el uso de las IA es una herramienta increíble, como diría nuestro buen amigo, Rais Busom, no hay que perder de vista el pensamiento crítico, por lo que es recomendable siempre considerar múltiples fuentes de información y no confiarnos ni entregarnos por completo a lo que una IA nos pueda ofrecer; pues esta no debe ser vista como una solución definitiva a los problemas, sino más bien como una herramienta complementaria que requiere de una evaluación crítica y un enfoque equilibrado. Es importante no depender por completo de la IA y tener en cuenta las limitaciones y posibles sesgos que pueden existir en los algoritmos.